Hoy en El Heraldo de Chihuahua fue publicada esta triste historia, Ángel un pequeñito entablo una batalla contra el cancer; el costo, un ojo, un caso mas que tendremos que sumar a los que aquí llevamos recopilados, anexo el articulo:
El Heraldo de Chihuahua
6 de junio de 2012
De la Redacción
Chihuahua, Chihuahua.- La alegría y buen ánimo de Ángel Dayán Ramírez Chapetla, de 6 años, no decae, a pesar de vivir la dolorosa experiencia de sufrir la extirpación del ojo derecho a consecuencia del cáncer y la imposibilidad de adquirir una prótesis con valor aproximado de 35 mil pesos.
Su mamá, Wendy Chapetla Díaz, relata que todo empezó en marzo del año pasado, cuando otro menor picó el ojo a Ángel en el jardín de niños donde estudiaba, quien al cabo de una semana veía puntos blancos en su campo de visión y le brotó una especie de tela blanca, días después había perdido la visión del ojo.
Preocupada, Wendy llevó a su pequeño hijo a revisión médica, sin embargo, le decían continuamente que sólo se trataba de una infección, por lo que armándose de valor enfrentó a directivos del Instituto Mexicano del Seguro Social, quienes dedicaron más atención al caso y fue cuando le diagnosticaron cáncer congénito de retina, al que coloquialmente se le llama "ojo de gato".
Tras semanas de exámenes y análisis le dieron la noticia que no había expansión de la terrible enfermedad, por lo que se procedió a realizar la cirugía de extirpación, con la finalidad de que no se diseminara en la frágil humanidad del menor, quien además vive en situación aguda de pobreza.
El 2 de agosto pasado, cuando los dolores y punzadas en el órgano ocular se hacían insoportables, fue intervenido en la ciudad de Torreón, donde el médico que lo atendía informó a Wendy una terrible noticia, el cáncer se había extendido hasta el nervio óptico, lo que mantuvo al niño en tratamientos y cuidados hasta que se logró erradicar.
Con ayuda de la Policía Comunitaria de Riberas de Sacramento, se hacen esfuerzos importantes para gestionarles ayuda alimentaria y beneficiarlos con soporte para sus necesidades básicas, sin embargo, el pequeño que es tratado con respeto y dignidad en su centro escolar donde cursa el primero de primaria sufre ante las miradas de otros niños, que curiosos le preguntan el por qué de su parche, a lo que responde que le tuvieron que quitar su ojito porque si no iba a morir.
"Mi hijo es un niño muy alegre, le gusta mucho bailar, en especial reggaetón y música muy rítmica, su caricatura favorita es Bob Esponja, y aunque le gusta mucho la escuela, tiene problemas de lectura, por la extirpación de su ojo", comenta Wendy, quien ha dado muestras de coraje y entereza al enfrentarse con valentía a la adversa situación de su hijo, además de sobrellevar el desempleo de su esposo, quien lucha por obtener un trabajo digno para sacar adelante a su familia.
Con una amplia sonrisa, repleta de la inocencia infantil que no mide el dolor, ni se deja vencer por los problemas, Ángel encara la vida con la esperanza de que algún día tendrá la prótesis que cubra el ojo faltante en su rostro.
Chihuahua, Chihuahua.- La alegría y buen ánimo de Ángel Dayán Ramírez Chapetla, de 6 años, no decae, a pesar de vivir la dolorosa experiencia de sufrir la extirpación del ojo derecho a consecuencia del cáncer y la imposibilidad de adquirir una prótesis con valor aproximado de 35 mil pesos.
Su mamá, Wendy Chapetla Díaz, relata que todo empezó en marzo del año pasado, cuando otro menor picó el ojo a Ángel en el jardín de niños donde estudiaba, quien al cabo de una semana veía puntos blancos en su campo de visión y le brotó una especie de tela blanca, días después había perdido la visión del ojo.
Preocupada, Wendy llevó a su pequeño hijo a revisión médica, sin embargo, le decían continuamente que sólo se trataba de una infección, por lo que armándose de valor enfrentó a directivos del Instituto Mexicano del Seguro Social, quienes dedicaron más atención al caso y fue cuando le diagnosticaron cáncer congénito de retina, al que coloquialmente se le llama "ojo de gato".
Tras semanas de exámenes y análisis le dieron la noticia que no había expansión de la terrible enfermedad, por lo que se procedió a realizar la cirugía de extirpación, con la finalidad de que no se diseminara en la frágil humanidad del menor, quien además vive en situación aguda de pobreza.
El 2 de agosto pasado, cuando los dolores y punzadas en el órgano ocular se hacían insoportables, fue intervenido en la ciudad de Torreón, donde el médico que lo atendía informó a Wendy una terrible noticia, el cáncer se había extendido hasta el nervio óptico, lo que mantuvo al niño en tratamientos y cuidados hasta que se logró erradicar.
Con ayuda de la Policía Comunitaria de Riberas de Sacramento, se hacen esfuerzos importantes para gestionarles ayuda alimentaria y beneficiarlos con soporte para sus necesidades básicas, sin embargo, el pequeño que es tratado con respeto y dignidad en su centro escolar donde cursa el primero de primaria sufre ante las miradas de otros niños, que curiosos le preguntan el por qué de su parche, a lo que responde que le tuvieron que quitar su ojito porque si no iba a morir.
"Mi hijo es un niño muy alegre, le gusta mucho bailar, en especial reggaetón y música muy rítmica, su caricatura favorita es Bob Esponja, y aunque le gusta mucho la escuela, tiene problemas de lectura, por la extirpación de su ojo", comenta Wendy, quien ha dado muestras de coraje y entereza al enfrentarse con valentía a la adversa situación de su hijo, además de sobrellevar el desempleo de su esposo, quien lucha por obtener un trabajo digno para sacar adelante a su familia.
Con una amplia sonrisa, repleta de la inocencia infantil que no mide el dolor, ni se deja vencer por los problemas, Ángel encara la vida con la esperanza de que algún día tendrá la prótesis que cubra el ojo faltante en su rostro.
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